Después de un arduo debate en el que varios científicos expresaron sus argumentos para determinar cuál es la especie más importante del planeta, llegaron a la conclusión de que la elegida es la abeja.
El egocentrismo humano podría llevarnos a pensar que al ser la única especie capaz de razonar es la más evolucionada y la que es 100% indispensable para el mundo, pues sin nosotros no existiría, pero creer eso sería además de narcisista algo muy erróneo porque cada ser vivo cumple con una función especifica, hay unos que incluso realizan tareas como la polinización o el control de plagas que nos hacen a nosotros depender de ellos, de hecho.
También te puede interesar: ¿Te gustan las abejas? Ya puedes considerarlas oficialmente un animal de compañía
Esas razones, entre muchas otras, llevaron a los científicos como el profesor David Thomas, quien propuso al plancton, y el Dr. George McGavin, que votó por las abejas, a presentar argumentos y pruebas para tener a una especie ganadora del título, fue así como después de la exposición, análisis y votación de la audiencia se determinó que el doctor George McGavin tenía la razón.
Dentro de las razones para que ganaran las abejas se encuentra el hecho de que más de un cuarto de millón de especies de plantas florares dependen exclusivamente de ellas, así que sin estas además de las flores, la agricultura (vegetales, árboles frutales y otros cultivos), se vería en grave riesgo.
También te puede interesar: Los insectos están desapareciendo en Alemania y esta es la aterradora razón
Bien, entonces las abejas son la especie más importante en el planeta, pero esto más que ser una gran noticia representa un foco rojo porque desafotunadamente muchas en el mundo están muriendo a causa de los insecticidas y la fragmentación de los espacios naturales, así que perderlas representaría algo horrible porque son las responsables de un tercio de todo lo que comemos, de modo que si se extinguieran no habría pasto para alimentar al ganado y sin ganado no tendríamos carne, leche, huevo y sus derivados, tampoco café, cacao, té, algodón, ni aceite de girasol, es decir no habría apicultura, ocurriría un efecto dominó, la cadena alimenticia quedaría totalmente alterada. La vida dejaría de ser como la conocemos.
Es necesario reflexionar acerca de la importancia de estos insectos, no son perjudiciales sino todo lo contrario, promover su cría y preservación es parte de la solución, así como crear más centros de producción y distribución, también proyectos sociales que apoyen a los productores de miel, entre otras acciones.
La realización de este debate no sólo pretendía conocer el nombre de la especie fundamental para supervivencia, sino hacer conciencia sobre la importancia de cada una de las especies para cuidarlas, de no hacerlo tendremos que enfrentar consecuencias catastróficas.
