El caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala ha dado un vuelco que podría marcar un importante parte aguas para la localización de los cuerpos o saber qué fue de ellos, además de tener claro parte de cómo ocurrieron los hechos.
A decir de información del diario Reforma, aquel 26 de Septiembre de 2014 no habrían sido sólo 43 sino hasta 60 chicos los que fueron «levantados» para que su rastro desapareciera y hasta la fecha no sea encontrado. Según la investigación del reportero Roberto Zamarripa, los que participaron en el hecho fueron policías de ese municipio, Cocula y Huitzuco y todo esto se sabe gracias a que se reveló una serie de mensajes de texto enviados por los jefes del grupo criminal Guerreros Unidos desde una Blackberry en Chicago, Estados Unidos a raíz de una intercepción por parte de agencias norteamericanas.
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Los mensajes y las llamadas forman parte de un expediente judicial con el que se procesa a ocho integrantes de los Guerreros Unidos en el país vecino, aunque no por el caso de los 43, están ahí por tráfico de droga, así que no han sido interrogados por lo ocurrido en Guerrero.
A decir del texto del Reforma, el mismo día en que los estudiantes de Ayotzinapa fueron retenidos, los Guerreros Unidos tuvieron un enfrentamiento con el grupo de Los Rojos, en donde hubo al menos seis muertos, así que los integrantes de GU pensaron que sus rivales pretendían tomar la plaza de Iguala, por lo que pensaron que la movilización de estudiantes era parte del plan rival.

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Pero lo que llama aún más la atención es que en esos mensajes interceptados, los líderes de la organización en Estados Unidos aseguraban desconocer el paradero de los desaparecidos e incluso, los líderes se sorprendieron al saber la cantidad de «paquetes» transportados, como ellos les llamaban.
Al final, aún no se sabe qué acciones tomarán a raíz de esto las autoridades mexicanas, aunque sí se sabe que la PGR ya tiene en su poder parte de las comunicaciones.
