De acuerdo con datos del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de VIH-SIDA, de la Secretaría de Salud federal, en 2018 se diagnosticaron 996 casos de SIDA en el país, en población de entre 15 y 24 años, de los cuales 861 corresponden a hombres y 105 a mujeres. A pesar de que los datos son contundentes, lo cierto es que las jóvenes y adolescentes enfrentan una mayor vulnerabilidad a la infección por VIH debido a las problemáticas de género.
Por eso, la DAU y el Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS) realizaron la Jornada de Acompañamiento Universitario y Campaña de Detección Oportuna de VIH, en la que se aplicaron mil pruebas rápidas duales para la detección de este virus y de sífilis.
También te puede interesar:La BUAP toma taller de perspectiva de género para hacer frente a la violencia
El objetivo es informar sobre los factores de riesgo de enfermedades de transmisión sexual entre la comunidad universitaria. La jornada de salud consistió en toma de peso, talla y cálculo de índice de masa corporal, toma de glucosa, revisión de vista y oído, módulo de vacunación del IMSS, orientación nutricional y en activación física, y pláticas de autoexploración de mama y testículo.
Además, el área de estomatología proporcionó servicio de profilaxis, diagnóstico, información sobre técnica de cepillado y aplicación de flúor. Al mismo tiempo se llevaron a cabo pláticas sobre suicidio, ansiedad y depresión; hostigamiento y acoso sexual, así como de sexualidad responsable. Sin duda, un ejemplo que deberían seguir todas las universidades para garantizar el apoyo a sus alumnos.