Vía Andrew George

Un perro abandonado es una de las cosas que más parten el alma, desafortunadamente este tema es bastante «normal» ya que hoy en día vemos perros en cada esquina pasando hambre, abusos y maltratos por parte de las personas. Los más «suertudos» terminan en perreras donde lejos de proporcionarles los cuidados necesarios y la atención que se merecen, les espera el funesto final de morir pero en este albergue de Costa Rica todo es diferente. Aquí Lya Battle se esfuerza por darle amor a nada más y nada menos que 700 perros.

También te puede interesar: El Presidente de Corea del Sur adopta a un perro callejero y lo vuelve mascota presidencial 
Vía Andrew George

Alejados de la ciudad, en las montañas de Santa Bárbara, provincia de Heredia, Costa Rica, viven 700 perros rescatados que corren libres entre los hermosos paisajes del rancho «Territorio de Zaguates», su nuevo hogar. Este lugar creado por Lya Battle y Álvaro Saumet tiene la finalidad de rescatar a todos estos ángeles con cola y darles la oportunidad de volver a comenzar.

«No creo que los perros merezcan una vida así, por eso iniciamos esto (…) Es difícil para nosotros verlos entrar, a veces muy asustados y muy maltratados. No hay manera de saber cómo vivieron antes, pero después de todo, lo que nos interesa es proporcionarles una nueva vida. Una vida feliz».- Lya Battle.

Gracias a su labor, Lya se ha ganado distintos motes como «La guardiana del paraíso de los 700 perros» o «La Madre Teresa de Calcuta de los perros», por su parte, ella afirma que conoce a cada uno de ellos e incluso recuerda el nombre de todos. Durante el día deambulan entre 3 hectáreas de terrenos verdes y en la noche al sonido de un simple chiflido, todos vuelven a la construcción para dormir calientitos unos con otros.

Sin embargo, el trabajo de rescatar a tantos animales no es fácil ya que la pareja se llega a gastar hasta 500 dólares al día para pagarles a los cuidadores y veterinarios debido a que a pesar de haber buscado que el gobierno les apoye, este se ha negado. 

También te puede interesar: #Viral Este cachorro decidió compartir su manta con un perro de la calle
Vía Andrew George

La idea de abrir el santuario también es promover la adopción tanto de los más pequeños como de los más grandes ya que aunque los perros disfrutan de este entorno libre de jaulas y correas, no es el mejor ambiente para que ellos vivan.

¿Qué te parece esta acción?, maravillosa, ¿no?