Un hombre de 58 años y sus seis hijos vivieron en el sótano de una granja al norte de Holanda “esperando el fin del mundo”. Sí, no es broma. Durante los últimos nueve años la familia estuvo viviendo en un cuarto cerrado, según confirmó la policía holandesa.
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Todo se supo gracias a que el mayor de los hijos, un hombre de 25 años, apareció en un bar a varios kilómetros de la granja. Ahí contó a la gente que sus hermanos menores, su padre y él habían estado viviendo encerrados en el sótano de la casa y que todos querían dejar de vivir así. El dueño del bar lo notó muy raro y decidió informar a la policía.
Cuando registraron el lugar, encontraron una escalera detrás de un armario en la sala, que conectaba con el sótano donde estaba toda la familia. Los hijos tienen más de 16 años pero afirman no haber tenido algún contacto con el exterior durante todo ese tiempo. Incluso algunos pensaban que no existían más personas viviendo en este planeta. Subsistían gracias a los alimentos que obtenían de su huerto y la leche de una cabra.
Sin embargo, hay otras versiones de la historia. Algunas dicen que el hombre en cuestión no es el padre, sino el inquilino. Otras que el hijo mayor twitteó anónimamente a forma de denuncia y así se enteraron las autoridades. Inclusive hay fuentes que dicen que la madre llegó con ellos hace 9 años y que ahora no saben nada de ella, hasta han llegado a pensar que está enterrada en la granja.
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Lo que sí es seguro es que la familia se escondió del «fin del mundo» por 9 años y que ahora, lo único que necesitan es cuidado y atención para tener una vida normal. Seguramente, este caso se irá revelando con el paso del tiempo.
