Una de las mejores cosas en México es nuestra comida y sin duda las tortillas son nuestra especialidad (además son famosas en todo el mundo). Estos pequeños círculos de felicidad hechos de maíz son una parte esencial en nuestra dieta, mucha gente dice que engordan, sin embargo, los nutriólogos aseguran que si dejamos de comerlas podríamos correr peligro.
El mito de comer tortillas
Expertos en alimentación y medicina del deporte, dicen que eliminar la tortilla de la dieta sin su supervisión o ayuda puede representar un riesgo ya que el sistema inmunológico resiente las consecuencias.
Últimamente a mucha gente se le hace fácil ir a Google y buscar recetas para bajar de peso, obviamente en todas ellas lo primero que eliminan son las tortillas pero lo que la gente no sabe (o se hace como que no sabe) es que estas recetas No están avaladas por un médico, ya que si lo estuvieran no habría necesidad de omitir este rico alimento porque según expertos como Guadalupe Herrera Estrada, nutrióloga de la UAM es un horrible mito el que la tortilla engode (obviamente si te comes un kilo diario claro que engordarás pero TODO en exceso es malo y engorda).
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La nutrióloga también especifica que este alimento por si solo (o sea si es en tacos ya valimos) no provoca un aumento de peso, pues no contiene grasas, sales o azúcar ya que esta elaborado de harina de maíz fuente alimenticia rica en fibra, proteínas, vitaminas y sobre todo calcio.
Así que no te dejes llevar por este mito y no elimines la tortilla de tu alimentación diaria, ya que el no comerla te expone a desmayos por falta de energía y cansancios extremos haciéndote más propenso a padecer enfermedades.
Las tortillas son uno de los alimentos más completos que tenemos y sus características nutricionales difícilmente se pueden encontrar en otro tipo de comida, nada más para que termines de darte una idea, cuando comes una tortillita estás dándole a tu cuerpo ácido fólico, hierro, zinc, vitaminas y minerales, además de prevenirte de los riesgos cardiovasculares, anemias, mal formaciones en los recién nacidos y hasta inhibir la aparición de células cancerosas. ¡Qué tal!