La industria del café no deja de sorprender con sus innovaciones. Ahora podemos disfrutar de nuestras bebidas en tazas ecológicas hechas con residuos de la deliciosa bebida.
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Del café reciclado y materias primas renovables nació este nuevo emprendimiento. Julian Lechner creó ”Kaffeeform”, una fórmula que permite crear nuevos y completos productos. Sus tazas para expresso y cappuccino tienen apariencia de madera marmoleada oscura, tienen olor a café, son muy livianas, lavables, duraderas y se pueden usar una y otra vez.
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Para producir el material, primero se recolectaron las sobras de los cafés locales en Berlín. Luego las combinaron con pegamentos naturales y partículas de madera de fuentes sostenibles para producir un líquido que se puede moldear por inyección para crear las tazas reutilizables. Aunque están llenas de estilo, provienen de la mismísima cascarilla que usualmente se tira a la basura.
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Utilizar ese tipo de utensilios es más económico, además son más resistentes y se pueden reciclar. No es una sorpresa que Kaffeeform fue ganador del premio de diseño de producto Red Dot 2018 por su impacto social e innovador sistema de recuperación de residuos naturales.
