Las adicciones son un tema bastante difícil que no solo afecta al individuo en cuestión sino que la familia entera se ve perjudicada por no saber controlar la situación y verse rebasada ante ella, debido a esto se crearon diversos centros con el objetivo de ayudar pero lamentablemente en el transcurso de la historia muchos de estos se han vuelto un verdadero infierno y lejos de ayudar solo agravan más las cosas.
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Esta historia es indignante, en China se crearon centros de rehabilitación para tratar de enfrentar el problema que les aqueja y es que según datos de la Asociación de la Juventud China para el Desarrollo de la Red cerca de 24 millones de jóvenes son adictos severamente a Internet, por lo que el país decidió que estos nuevos centros de ayuda los rehabilitaran pero en cambio, China está en la mira por las diversas quejas de maltratos cometidos en estos lugares.

En China se considera un problema mental la adicción al Internet y se cree que existen alrededor de 250 campamentos con internos que van desde los 8 hasta los 30 años de edad a los que se les asignan tareas como si estuvieran en un servicio militar, desde hacer de comer, hasta limpiar y ejercitarse desde muy temprano para tratar de despejar su mente y suprimir sus deseos de estar en línea, incluso se rumora que a algunos de ellos se les aplica escaneos cerebrales para saber cuál es su reacción estando conectados a Internet.

La mayoría de las personas internadas son llevadas a la fuerza, incluso a rastras por los familiares que tratando de encontrar una solución deciden dejarlos en manos de personas que brindan formas de terapias poco adecuadas. Dos casos en particular que le han dado la vuelta al mundo son el de una joven de 16 años, Chen Xinran, que al salir de uno de estos campamentos mató a su madre como represalia tras haberla internado, atándola a una silla y dejándola sin comer durante una semana mientras su padre luchaba en el hospital tras haber sido apuñalado por ella. La chica declaró haber sufrido maltratos en su estancia ahí, desde golpizas brutales hasta descargas eléctricas para corregir el problema.
Y el otro fue de un joven que murió dentro de uno de estos centros de ayuda a los 2 días de ingresar, sus padres declararon que al ver el cuerpo en la morgue este tenía cicatrices desde la cabeza hasta los pies, lo cual provocó la indignación de China, el lugar ha sido clausurado y su director y cuatro presuntos responsables más están detenidos, sin embargo, no es el único «centro de rehabilitación al Internet» en este país.

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Lamentablemente, tuvieron que ocurrir estas desgracias para que la gente se cuestionara sobre las formas tan poco ortodoxas de las que son víctimas estos jóvenes y es que lejos de ayudarlos hacen que se vuelvan agresivos y retraídos, como lo asegura Maccotta, un fotógrafo infiltrado en uno de estos campamentos.
«Aniquilan su personalidad (…) Mantienen una postura formal de silencio y obediencia. No demuestran su tristeza (…) Para un niño es muy difícil vivir una experiencia como esta, no creo que ayude», dijo Maccotta.
Lastimosamente, las medidas para detectar estos lugares y cerrarlos definitivamente no son muy eficaces que digamos porque aún hay mucha gente que prefiere aventar la moneda al aire con la esperanza de que su familiar salga «curado», así que si la policía les pregunta al respecto se hacen de la vista gorda, mientras tanto, se espera que ningún otro lugar del mundo replique el sistema asiático que está causando temor a todos los adolescentes.